Tener animales y bebés bajo un mismo techo parece una circunstancia incompatible. Sin embargo, puede que tenga más ventajas que inconvenientes…
Embarazadas que dan en adopción a sus gatos (por creer uno de los mitos sobre los felinos más extendidos), perros que son trasladados a la casa de los abuelos, familias que construyen un pequeño apartamento para sus mascotas en el lado más recóndito de la casa… La llegada de un bebé es un acontecimiento que genera muchos cambios de hábitos y que altera (aunque no siempre) el protagonismo dentro de la unidad familiar de los miembros de cuatro patas. ¿Realmente la presencia de ambos en el hogar es incompatible? Los amantes de los animales aseguran que no y afirman, además, que la experiencia es realmente enriquecedora para todas las partes. Recopilamos todas las razones a favor de esta relación casi fraternal y enumeramos los pasos a seguir para que todo salga a pedir de boca.
Bebés y animales pueden compartir techo y salir beneficiados de la experiencia #niñosymascotas Clic para tuitearCuando el bebé es la nueva incorporación, las principales medidas que debemos tomar deben centrarse en las mascotas. Lo más recomendable es preparar al animal para la llegada del recién nacido, acostumbrándole a su olor, sus juguetes, sus muebles… Una vez en casa, debemos dejar que el perro/gato se acerque a conocer al niño (mediante el olfato), tranquilizarles también a ellos en los momentos de llanto desconsolado y evitar que se sientan celosos. A medida que el niño crece, es imprescindible enseñarle a respetar a la mascota: que no le tire del rabo o de las orejas, que le deje comer o beber tranquilo, que no le levante la mano…
Si son los más pequeños de la casa los que nos piden un nuevo miembro peludo, debemos pensar bien en todos los pros y los contras. Puede tratarse de un nuevo capricho de nuestros hijos, como un caramelo o el muñeco de moda, o de una verdadera pasión en potencia. Tomad una decisión en familia y valorad, seriamente, la posibilidad de adoptar a vuestra futura mascota (aquí te contamos dónde puedes hacerlo) en vez de comprar.
¿Quién llegó primero a tu casa: los niños o los animales? ¿Cómo es la convivencia?