Tipos de arena para gatos: ¿cuál elegir?

Los gatos son animales muy limpios. Pero, para hacer sus necesidades, necesitan un arenero en condiciones óptimas. ¿Sabes qué arena es la mejor?

Una de las principales ventajas de tener un gato es la cantidad de paseos que te ahorras a lo largo de solo una semana. Lo sabemos: el perro es el mejor amigo del hombre. Pero, cuando empiezan a las tormentas imparables, que tire la primera piedra el que no haya pensado “ojalá no tuviéramos que salir ahora”. Un gato doméstico puede pasarse una vida entera en casa (con las salidas rutinarias al veterinario para las revisiones, vacunas y demás consultas) sin volverse loco. ¿Cómo lo hace? Dedicando el día a dormir (mucho), a jugar y comer (un poco) y a asearse (bastante más de lo que algunos pueden imaginar).

Los felinos se han ganado a pulso su puesto entre los primeros de la lista de las especies más pulcras. Pero, para mantenerla, los gatos necesitan nuestra ayuda. Tenemos que proporcionarles el arenero y el sustrato más adecuado. Si eres dueño de un minino, seguro que has tenido algún problema, al menos de decisión, a la hora de elegir entre los diferentes productos del mercado. Te echamos una mano.

Principales diferencias entre los tipos de arena para gatos

1. Arena convencional. Es el sustrato que más se ha utilizado hasta hace bien poco. Es económica y se encuentra en cualquier supermercado, por lo que aún hay muchas familias que la utilizan. Aun así, sueltan mucho polvo y, aunque lo intenten con nuevas versiones perfumadas, el olor al reaccionar con las heces del gato es desagradable.
2. Arena aglomerante. Se trata de un tipo de sustrato compuesto por arcilla aglomerante que hace que todos los residuos (tanto sólidos como líquidos) formen pequeños aglomerados fáciles de retirar. La arena que queda en la caja está completamente limpia. Como contra, que genera mucho polvo y un perfume que no consigue tapar del todo los malos olores.
3. Arena de sílice o arena de cristal (por el aspecto). Es una de las que más están ganando terreno. De tipo sintético, creada a partir de silicato de sodio, es la que mejor absorbe los olores. Dura más tiempo y, por el olor, se sabe bien cuándo hay que cambiarla. Como contra, tenemos que destacar que es más cara que el resto, menos ecológica y no es del agrado de todos los gatos.
4. Arena ecológica. Normalmente, está compuesta por virutas de madera o de fibras vegetales. Tienen bastante poder aglomerante y absorben bien los olores. Pero, además de ser más caras, se adhieren a las patas de los gatos y éstos van dejando huella allá por donde pasan.

Recomendaciones sobre la arena para gatos

Casi por naturaleza, los gatos están preparados para utilizar el arenero desde bien pequeños. De hecho, es bastante probable que cuando adoptes a un gatito este busque instintivamente la caja para hacer sus necesidades. Si te ahorras este primer paso del aprendizaje, tu tarea será mucho más sencilla: mantén la arena limpia y sin olores. De otra manera, tu gato podría reaccionar en contra y localizar un sitio mejor para dejar sus deposiciones.

También puedes intentar enseñarle a utilizar el retrete. Pero eso, mejor, para otro día:

Y tú gato ¿qué tipo de arena utiliza? ¿Alguna vez has tenido problemas con algún tipo de las que hemos presentado?