Mascotas felices: cómo contribuir al bienestar animal en casa

Una mascota es una responsabilidad para todos los miembros del hogar. Pero ¿qué necesitan los animales de compañía para vivir plenamente felices?

Adoptar o comprar un animal de compañía parece una tarea sencilla, pero tiene mayores implicaciones de lo que puede parecer. Con esto, no queremos meter miedo a todos aquellos que se están planteando ser “papis primerizos” de un pequeño peludo. Sino poner de manifiesto una realidad que, a la vista de los últimos datos sobre abandono, aún sigue siendo difícil de comprender por miles de familias en España. Por ello, asociaciones, protectoras y albergues, veterinarios y amantes de los animales como ‘Vivir Entre Mascotas’ recordamos siempre la importancia de asumir responsabilidades antes, incluso, de que el nuevo miembro de la familia llegue a casa. ¿Qué necesitan para ser plenamente felices? ¿Cómo debemos asegurar su bienestar?

Cinco claves del bienestar animal: responsabilidad desde pequeños

Varios Colegios de Veterinarios de España han iniciado diversas campañas en colegios para mejorar el conocimiento que los niños tienen sobre las mascotas e incentivar el respeto y las responsabilidad hacia ellas. El objetivo es que todos los miembros de la familia queden implicados en el cuidado, la atención y la educación del animal.

Más allá de eso, las autoridades responsables del bienestar animal recuerdan a mayores y pequeños los pilares básicos sobre los que se sostiene la adopción y convivencia responsable con los animales de compañía:

1. Un nuevo inquilino. Antes de tomar la decisión y llevar al animal a casa, toda la familia debe ser consciente no solo de su incorporación a la convivencia diaria, sino también de su existencia como ser vivo. Va a necesitar su espacio, sus momentos de ocio, aseo y descanso, el cariño de toda la familia… Si no tenéis tiempo o recursos, no es el momento de adoptar o comprar.
2. Compromiso permanente y prolongado. Un perro o un gato pueden vivir una media de entre diez y quince años. Durante todo este periodo, necesitáis comprometeros con su cuidado y atención, tanto en los momentos malos como los buenos.
3. No a los recién nacidos. Sí, los cachorros más pequeños que la palma de nuestra mano son toda una perdición. Pero, como los bebés, tienen ciertas necesidades que nosotros, los humanos, no podemos cubrir. Salvo que os encontréis un gato o un perro recién nacido abandonado (esperad a que llegue su madre antes de cogerlo), los animales necesitan mamar y aprender de sus progenitoras unos básicos de supervivencia. Lo ideal es no separarlos antes de los dos meses de edad.Los cachorros atraen todas las miradas,pero mejor pensar en su vida adulta #bienestaranimal Clic para tuitear
4. En caso de duda, el veterinario es la solución. Incluso los amantes de los animales más fieles tienen preferencia por una especie o una raza concreta. Antes de tomar una decisión, ten en cuenta los pros y los contras de todas las opciones. Y, en caso de no poder elegir, consultad con el veterinario.
5. Su bienestar es el de la familia. Una vez que la mascota llega al hogar, su bienestar y buena calidad de vida se convierten en una obligación más de todos los inquilinos. Las visitas periódicas o urgentes al veterinario, su alimentación su educación (en positivo) y sus ratos de ocio y mimos son una tarea que no puede quedar nunca pendiente.

¿Te costó mucho asumir la responsabilidad de tener un animal de compañía? ¿Qué implicaciones «ocultas» crees que tiene la adopción o compra de una mascota?